El ejercicio se llevará a cabo el próximo jueves 10 de noviembre y espera movilizar a todas las
personas que vivan, trabajen, estudien o estén de paso en el borde costero de la región, bajo la
cota de 30 metros sobre el nivel del mar.
El próximo 10 de noviembre se cumplen 100 años del terremoto de Atacama de 1922, este
simulacro tiene por propósito conmemorar mediante una acción de preparación comunitaria esta
fecha tan importante.
Este simulacro es parte del programa Chile Preparado, se suma a los que ONEMI desarrolló
ONEMI en los años 2010, 2013 y 2018.
La mañana de este miércoles, el Delegado Presidencial de Atacama, Gerardo Tapia; junto al Director de
ONEMI Atacama, Roberto Muñoz; encabezaron una reunión del Comité para la Gestión del Riesgo de
Desastres de la Región de Atacama (COGRID), para anunciar el quinto simulacro que será realizado en la
región el próximo jueves 10 de noviembre a las 11:50 hrs. En la cita, expusieron frente a diversas
autoridades regionales y representantes de organismos de emergencia para coordinar la metodología del
ejercicio.
Al momento, el programa Chile Preparado, impulsado por ONEMI, ha desarrollado ejercicios por la variable
de sismo – tsunami los años 2010, 2013 y 2018, y en esta ocasión busca poner a prueba la capacidad de
respuesta de la comunidad, movilizando a todas las personas que vivan, trabajen, estudien o estén de paso
por la zona de amenaza de tsunami, comprendida por el área bajo la cota de 30 metros sobre el nivel del
mar.
Asimismo, junto con fomentar la cultura preventiva y de autocuidado en la sociedad, buscando involucrar a
los distintos actores de la comunidad para lograr una alta participación del público, y así mejorar los tiempos
de respuesta frente a una posible emergencia, este ejercicio se enmarcará en la conmoración de los 100
años del terremoto de Vallenar, el cual con una magnitud de 8.5 dejó una alta cifra de fallecidos y heridos.
Al referirse al desarrollo de este simulacro, el Director Regional de ONEMI Atacama, Roberto Muñoz,
aseguró que “hoy desde la casa Maldini Tornini, que es una casa que fue construida en 1915 y que fue testigo
del terremoto del 10 de noviembre de 1922, en un acto de recuperación de la memoria histórica, hemos
planificado el simulacro regional de borde costero de sismo y tsunami, que será el día jueves 10 de
noviembre alrededor del mediodía”.
“En este ejercicio hemos incluido a todo el borde costero de la Región de Atacama, los puertos de Chañaral,
Caldera y Huasco, y las localidades rurales de Copiapó y Freirina. Es relevante hoy día, a través de la
coordinación, avanzar con la planificación de este simulacro, donde proyectamos evacuar a más de 20 mil
personas que habitan en la zona de amenaza”, indicó la autoridad.
Por su parte, el Delegado Presidencial de Atacama, Gerardo Tapia, indicó que “para nosotros es muy
importante como Gobierno, el trabajo colaborativo e intersectorial que tenemos que realizar, para estar
preparados ante eventos naturales. El director de ONEMI nos ha convocado y hemos llamado en conjunto a
todas las autoridades regionales y servicios, frente a una necesidad, ya que la naturaleza no avisa y puede en
cualquier instante ocurrir un sismo de gran intensidad”.
“Uno cuando va a una prueba estudia y se prepara, hoy día tenemos que estar preparados frente a cualquier
llamado de la naturaleza que nos pudiera afectar fuertemente. La naturaleza nos saca a prueba todos los
días y en caso de que así ocurra, nosotros tenemos que estar 100% preparados, con cada uno de los servicios
y cada una de las acciones que debemos tomar”, manifestó el Delegado.
Para finalizar, el Director Regional de la Oficina Nacional de Emergencia explicó se capacitará a evaluadores
que permitirán, mediante una pauta de evaluación del ejercicio, establecer los puntos a mejorar en cuanto a
infraestructura de las zonas evacuadas y la metodología de los simulacros. Asimismo, agregó que la
información relativa al simulacro y los planos de evacuación se encuentran disponibles en el sitio web
www.onemi.cl y en el Visor Chile Preparado, donde se pueden revisar las vías de evacuación y la ubicación
de los puntos de encuentro y zonas seguras del borde costero de la Región de Atacama.